Un soldado ruso que participó de la invasión a Ucrania solicitó asilo político al llegar a España. Según informó el diario británico The Guardian, el joven de 27 años aterrizó este martes, en un vuelo procedente de Georgia, a la capital española y estuvo retenido en el centro de inmigración del aeropuerto.
“No puedo volver a Rusia porque los agentes del FSB (el Servicio de Seguridad de Rusia) me matarán. Tengo mucho miedo”, aseguró el soldado.
Nikita Chibrin estuvo más de cuatro meses en Ucrania y se mostró en desacuerdo con la guerra. “Estoy completamente en contra de la guerra y de la política de Vladimir Putín. No solo yo estoy en peligro, sino también mi familia» relató el joven.
Chibrin formó parte del 64.ª Brigada Independiente Motorizada, unidad que fue acusada de cometer crímenes de guerra en la región de Kiev en marzo pasado.
Sin embargo, el soldado negó haber participado de estos crímenes y aseguró que no disparó un arma “ni una sola vez” mientras estuvo en Ucrania.
Chibrin quiere testificar en un tribunal internacional porque “no tiene nada que ocultar”. Y remarcó: “esta es una guerra criminal que empezó Rusia y quiero hacer todo lo posible para que acabe”.
El soldado decidió irse de Rusia después de desertar de su unidad en Ucrania en junio. Sin embargo, desde el inicio de la guerra, Chibrin contó que le comunicó a sus comandantes su oposición al conflicto, lo que le costó su rango como mecánico del Ejército y se le asignó tareas de trabajos manuales.
“Me amenazaron con encarcelarme. Al final, mis comandantes decidieron utilizarme para limpiar y cargar. Me alejaron del campo de batalla”, señaló.
Chibrin nació en Yakutsk, en el este de Siberia y se unió al Ejército ruso en el verano de 2021 porque no tenía trabajo. “No pensé que fuera a ir a ninguna guerra”, explicó.